¡Hola, soy José Ángel!

Los libros han tenido una influencia a lo largo de mi vida, y uno de los primeros libros que recuerdo de mi infancia fue Momó de Michael Ende. En que la protagonista, una niña, a través de la escucha a los demás, deseaba acompañar a la gente que se lo pedía y acercaba a ella, a humanizar sus vidas.

La presencia y la escucha han influido en mi forma de ser para conocerme y conocer a la persona que tengo al lado. Quizás por ello, me formé en el Grado de Educación Social de la Universitat de València, para posteriormente hacer el Máster de Secundaria.

En 2017, con 25 años, viví una situación personal que marcó un antes y un después en mi vida. En ese momento se abrió una herida que no me había dado cuenta que la tenía.

Más tarde, a principios de 2022, la herida se volvió a abrir y mi cuerpo me lo recordó con señales que hasta esa ocasión había ignorado. Era momento de prestarle atención y especialmente, darle cariño. Es por ello que decido empezar mi camino de sanación, autoexploración y crecimiento personal, acudiendo a Terapia Gestalt.

Poco a poco empiezo a ser consciente de aquello que me estaba pasando y que no entendía el para qué me estaba pasando.

En esa época estaba estudiando unas oposiciones para ser docente y las tuve que dejar. Más tarde, tomé la decisión de empezar a estudiar el Máster en Terapia Gestalt en el Instituto Aware de València, perteneciente al Institut Gestalt de Barcelona, con una duración de 3 años.

Y de nuevo, un libro volvió a influir, y es que durante esos años cayó en mis manos «El hombre en busca del sentido» del psiquiatra Viktor Frankl, creador de la Logoterapia. Me fascinó su historia y decidí profundizar sobre esta corriente humanista terapéutica.

Para ello, primero realicé el Diplomado en Logoterapia: Humanismo y sentido de vida, ofrecido por la Universidad Anáhuac de México. Me gustó y quise aprender más, por eso hice el Máster internacional en Logoterapia ofrecido por DAU Escuela de Vida (Perú) y avalado por el Viktor Frankl Institute Vienna.

Gracias a mi profesión, durante años he acompañado a personas que atraviesan momentos de cambio, crecimiento, dolor o búsqueda.

Hoy decido dar un paso más allá y abrir Espai Alcàsser, un lugar donde poder seguir acompañando procesos.

En continuo aprendizaje, lo hago desde una mirada que primero ve a la persona, abraza la emoción, su historia y el sentido que para ella tiene.